¿Ascender a un empleado o contratar a una persona externa?

Cuando necesitas cubrir un puesto de cierto nivel de responsabilidad en tu empresa, normalmente tienes dos grandes vías. La primera es ascender a esa posición a uno de tus empleados, y la segunda es lanzar un proceso de contratación externa. Cada una de las opciones tiene sus ventajas e inconvenientes. Vamos a repasarlas para ayudarte a decidir.

Ascender a un empleado: las ventajas

  • La persona que toma posesión del puesto ya conoce perfectamente la empresa, y entiende en detalle los entresijos del negocio y el organigrama. Eso hace que pueda ser operativa muy rápidamente en muchos de los aspectos del trabajo, y eso representa un ahorro importante.
  • La promoción interna es una herramienta de motivación muy importante, tanto para el empleado que ha sido ascendido como para sus compañeros. Es una prueba de una buena gestión de RRHH, que una carrera es posible dentro de la empresa, y que el buen trabajo está recompensado. Eso puede animar a muchos a desempeñar sus labores con más dedicación y compromiso.
  • La empresa se ahorra los honorarios de las empresas de recursos humanos, que a menudo representan un 10% del salario anual bruto del puesto ofrecido.
  • Si el empleado ya conoce perfectamente la empresa, lo contrario también es cierto. Eso evita los errores de contratación y los periodos de prueba. Contratar a una persona equivocada y tener que repetir el proceso de contratación es una posibilidad real con el reclutamiento externo.

Los inconvenientes de la promoción interna

  • Puede que la persona ascendida necesite formación complementaria en algunos aspectos técnicos o de gestión requeridos por sus nuevas responsabilidades. Eso puede ser costoso, tanto en tiempo como en dinero.
  • A veces, no se consigue motivar al resto de los empleados, sino todo lo contrario. Hay que tener cuidado en hacer un proceso de ascenso justo y transparente. Si da la sensación que la persona ha obtenido sus nuevas responsabilidades por favoritismo y no se merece el puesto, el impacto puede ser muy negativo.
  • La visión de la persona ascendida ya está muy influenciada por su experiencia en la empresa, lo que puede limitar la innovación.
  • En caso de tener que cambiar de centro de trabajo, los aspectos logísticos pueden ser un impedimento.

Las ventajas de la contratación externa

  • Una base de candidatos virtualmente infinita. El mercado de trabajo es enorme, y se puede buscar una persona que encaje perfectamente con los requisitos del puesto (en términos de experiencia y formación), a diferencia de la promoción interna. Eso implica que se ahorra en formación, especialmente en el caso de perfiles muy técnicos.
  • Da la posibilidad de contratar a jóvenes, que serán más dispuestos a absorber la cultura de empresa, a formarse y ganar experiencia.
  • Permite integrar a una persona con una visión diferente, que será capaz de aportar una mirada renovada sobre las problemáticas de la empresa, además de poder aportar técnicas aprendidas durante sus otras experiencias.

Contratar a una persona externa: los inconvenientes

  • La persona tardará unas semanas en familiarizarse con la empresa y con el puesto.
  • Si la empresa gestiona todo el proceso de contratación en interno, representa un trabajo que consume mucho tiempo y esfuerzo. Si se opta por una empresa de recursos humanos, los honorarios son elevados.
  • Existe el riesgo de equivocarse de persona, y tener que volver a empezar el proceso desde cero.
  • Los empleados pueden sentir cierto resentimiento por no haber sido ascendidos, y pensar que no existen oportunidades de evolución en la empresa.

Cada empresa es un mundo (ya cada persona también)

Si tienes un negocio pequeño, lo normal es que tengas que ir contratando talento fuera, simplemente porque no dispones de muchas opciones en interno. Si tienes una empresa grande, será más factible que puedas contar con tus empleados actuales para cubrir ciertos puestos de responsabilidad.

También depende de tu estrategia de recursos humanos. Si cuando contratas a una persona para un puesto buscas a un perfil que tiene potencial de evolución, aunque tengas que pagarle un poco más, entonces tendrás luego un candidato para asumir mayores responsabilidades. Si al contrario te limitas a contratar personas que solo pueden hacer un tipo de trabajo, no tendrás más remedio que contratar fuera cuando necesites cubrir un puesto más importante.

Y, por supuesto, los recursos humanos no son una ciencia exacta. Puedes ascender a una persona con potencial y que no funcione para nada en sus nuevas responsabilidades. Lo mismo pasa contratando fuera. Es lo bonito y lo complicado de ser humano y tratar con otros seres humanos. A veces te llevas sorpresas positivas, otras veces no tanto.

¿Qué te han parecido nuestros pros y contras para contratar talento fuera o apostar por la promoción interna? Puedes compartir tus opiniones y experiencias en la sección de comentarios.

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