¿Cuáles son los tipos de normas ISO más importantes?

normas isoDecía Henry Ford que la calidad es hacer las cosas bien incluso cuando nadie está mirando. Hoy vamos a explorar el fascinante mundo de las normas internacionales de calidad, conocidas como ISO. Empezaremos por explicar qué son, antes de detallar las principales, y de contarte por qué merece la pena que te plantees implementarla en tu empresa. Te pueden dar una gran ventaja comparativa y te ayudar a ser más eficiente, así que no te pierdas esa lectura.

¿Qué son las normas ISO?

Cuando hablamos de las normas ISO, nos referimos a un conjunto de estándares con reconocimiento internacional. De hecho, las iniciales son el acrónimo de International Organization for Standardization. Esas normas fueron creadas con el objetivo de ayudar a las empresas a establecer unos niveles de homogeneidad en temas de gestión, prestación de servicios y desarrollo de productos en la industria. Pero se ampliaron a multitudes de áreas de gestión, y ya no se limitan a las empresas industriales.

Hasta la fecha se han creado más de 23.000 estándares. La ISO es una organización no gubernamental, que involucra a 164 países y tiene su sede en Ginebra (Suiza).

¿Por qué implementar normas ISO en tu empresa?

Antes de ponerte a contactar con una consultoría y asesoría de normas ISO para implementar esas buenas prácticas en tu empresa, seguro que te preguntas las razones para hacerlo. Al final del artículo lo explicaré más en detalle, pero me ha parecido importante darte una primera visión.

Creo que el principal beneficio de implementar las normas ISO es que te permite trabajar de manera más eficiente y con más control. Al implantar buenas prácticas en las actividades de tu negocio, no solo logras más clientes satisfechos, sino que te permite reducir los costes y tener una atención más rápida y eficaz para tus consumidores.

¿Cuáles son los certificados ISO más importantes?

ISO 9001: Sistemas de Gestión de Calidad

Sin duda es la norma de calidad más conocida, y también la más implantada entre las empresas en todo el mundo. Su propósito principal es garantizar la calidad de los productos y servicios, así como la calidad del proceso de producción. Para los clientes potenciales, se trata de un reclamo muy importante, puesto que cumplir con el estándar de la ISO 9001 demuestra fehacientemente que la empresa cumple realmente con determinados estándares de calidad.

Los grandes principios de este certificado son el enfoque en el cliente, el liderazgo, la implicación de las personas, el enfoque de procesos, la toma de decisiones basada en evidencias, la mejora continua y la gestión de relaciones con terceros.

ISO 14001: Sistemas de Gestión Ambiental

Con la importancia que tiene la sostenibilidad en nuestra sociedad, en las últimas décadas, la certificación ISO 14001 ha ido cogiendo cada vez más protagonismo. En concreto, esa norma permite a las empresas demostrar el compromiso que han asumido con la protección del medio ambiente, mediante la gestión de los riesgos medioambientales asociados a la actividad desarrollada por la empresa.

ISO 18001: Sistemas de Gestión de la Seguridad y la Salud

Dentro de la tendencia de unas empresas cada vez más conscientes de su impacto social y de la responsabilidad corporativa, otra certificación muy importante es la ISO 18001. Su propósito es velar por la integridad y seguridad de los trabajadores, controlando a los potenciales factores de riesgo en el desempeño de la actividad del negocio.

ISO 16949: Calidad en el Sector Automoción

La industria automotriz es sin duda uno de los pilares de la economía moderna. La fabricación y comercialización de vehículos es una actividad extremadamente compleja, en la que intervienen una multitud de actores, proveedores y procesos. De allí que exista una certificación ISO específica para el sector. Se encarga de organizar la calidad para la producción en masa, así como para las piezas de recambio. Es una norma extremadamente relevante para las empresas del sector automoción.

ISO 19011: Directrices para la Auditoría de los Sistemas de Gestión

Un paso adicional hacia la excelencia es implementar sistemas de control más activos, con auditorías internas orientadas a aspectos muy concretos de la actividad de la empresa, como puede ser la calidad, o, por supuesto, el medio ambiente. Con la norma ISO 19001, las empresas pueden decidir de forma voluntaria cuáles son las áreas en las que quieren hacer auditorías periódicas para poder mejorar sus procesos internos.

ISO 27001: Sistemas de Gestión de la Seguridad de la Información

Con la importancia estratégica que ha cogido la informática en la gestión de los negocios, tiene sentido que se haya diseñado una certificación ISO dedicada. En concreto, con la ISO 27001, las empresas pueden, de manera voluntaria, acreditar la seguridad de la información y la implementación de buenas prácticas.

ISO 22000:  Seguridad Alimentaria

Sin sorpresa, la industria alimentaria tiene normas específicas para garantizar la seguridad de los alimentos para poder ofrecer unos productos seguros a sus consumidores. Concretamente, la ISO 22000 permite a las empresas del sector alimentario poner en marcha una serie de procesos y requisitos, que aseguran la completa inocuidad de los alimentos en todas las fases del proceso de elaboración y distribución, hasta llegar hasta el cliente final.

¿Cuáles son los principales beneficios de implementar las normas ISO para una empresa?

Las normas ISO dan una ventaja competitiva

Poner en marcha procesos que han demostrado su eficacia es una manera de aprovechar el conocimiento acumulado, y conseguir una organización óptima. Las normas ISO ayudan a las empresas a trabajar con una mayor colaboración interna, y a mejorar el desempeño de las actividades. Pero la ventaja competitiva va más allá de ser una organización más eficiente.

Porque esos procesos también involucran más a los trabajadores, lo que implica una mayor motivación, que acaba resultando en productividad. Y, finalmente, simplemente tener un sello de calidad potencia la imagen de marca de la empresa, no solo para potenciales clientes, sino también con terceros (proveedores y socios estratégicos).

Un enfoque en la satisfacción del cliente

Ya lo comentamos antes cuando hablamos de los principios de las normas ISO 9001: el enfoque al cliente encabeza la lista de prioridades. De esa manera, poner en marcha las normas ISO te permite conocer mejor qué necesita tu público objetivo, además de descubrir sus preferencias y gustos. Con es enfoque al cliente, puedes centrar tus esfuerzos en ofrecer valor a los consumidores potenciales, mediante la calidad, por supuesto, pero también el rendimiento, la relación calidad precio, o los servicios que se pueden ofrecer.

Optimización y mejora de resultados

Simplemente con implantar las mejores prácticas que te aportan las normas ISO, vas a mejorar los procesos de tu empresa, lo que significa reducir costes, eliminar duplicidades, a la vez que se incrementa la calidad de los productos y servicios. Todo eso, ayuda a mejorar la rentabilidad del negocio, tanto porque se trabaja con más eficacia, como porque se fidelizan los clientes.

Ayudar a un mundo mejor

Como has podido ver, muchas de las normas ISO ayudan no solo a tener una empresa más eficiente, sino a tener un impacto positivo sobre la sociedad. Hablamos de medioambiente, de seguridad de los empleados, y más elementos de un capitalismo responsable que cala cada vez más. Si puedes ser a la vez más eficiente y responsable, mejor, ¿No crees?

Espero que con este artículo hayas podido tener una primera visión de qué son las normas ISO y cómo implementarlas en tu empresa puede suponer una gran ventaja.

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