A diferencia de la mayoría de la gente, llevo muchos años trabajando principalmente desde casa. Suelo decir que la pandemia me pilló preparado. Por eso creo que hablo con propiedad cuando se trata de hablar de los pros y contras del teletrabajo, por lo menos desde el punto de vista del empleado o trabajador autónomo. Pero veamos las ventajas e inconvenientes de trabajar a distancia, tanto para las empresas como para los trabajadores. Hay aspectos prácticos, económicos y sociales, entre muchas cosas.
¿Por qué analizar los pros y contras del teletrabajo?
La reciente pandemia nos ha mostrado que trabajar a distancia desde casa es un formato que puede funcionar muy bien para muchas empresas, especialmente para los trabajos de oficina. Ya era bastante común para las empresas permitir a sus empleados trabajar desde sus domicilios unos días al mes, y es probable que la tendencia vaya a más en el futuro.
Analizar los pros y contras del teletrabajo, o sus ventajas e inconvenientes si lo prefieres, no es para llegar a una respuesta binaria. No se trata de elegir entre dos opciones cerradas. Hay lugar para estrategias mixtas y para nuevos formatos. Mira por ejemplo esas cinco posibilidades.
- No hay nada de teletrabajo, todos los empleados están cada día en las oficinas de la empresa.
- Algunos días al mes los empleados trabajan desde casa, el resto en la oficina.
- Se trabaja mitad desde casa, mitad desde un lugar de trabajo en común.
- Algunos días al mes los empleados trabajan desde el lugar en común, el resto en casa.
- Solo se teletrabaja.
Habrás notado que, a partir del punto 3 hablo de lugar de trabajo en común. Porque no tiene que ser una oficina en el sentido clásico, puede ser perfectamente un espacio de coworking en Madrid o en la ciudad donde esté basada la empresa. Porque, a medida que vengan menos los empleados a la oficina, deja de compensar pagar unas oficinas todo el tiempo, y empieza a ser interesante buscar formatos más flexibles.
Pros y contras del teletrabajo: ventajas para trabajadores y autónomos
No pierdes tiempo en transporte
Incluso si antes tenías tu lugar de trabajo a quince minutos andando de casa, que ya sería algo muy bueno, si te pones a trabajar desde casa ahorras media hora cada día. Y ese tiempo lo puedes usar para dormir más, para tu ocio, hacer deporte o lo que te apetezca. Como la mayoría de los trabajadores tienen tiempos de desplazamientos muy superiores, el trabajo a distancia permite ahorrar mucho tiempo cada día.
Tienes más libertad para organizar tu trabajo
Cuando trabajas desde casa, no tienes a nadie encima que esté controlando lo que estás haciendo. Sigues teniendo jefes e instrucciones, pero tienes mucha más libertad para organizar tu tiempo de trabajo, incluso si tienes que cumplir un horario determinado. Cuando se habla de los pros y contras del teletrabajo, esa libertad relativa se cita frecuentemente, porque la autonomía y la responsabilidad asociada son percibidas de forma positiva por un gran número de trabajadores.
Se gasta menos trabajando desde casa
No hace falta que compres ropa especial para trabajar como trajes y corbatas, o al menos no necesitas tanta variedad. Además, puedes comer en casa y no necesitas ningún modo de transporte. Al final, el teletrabajo le suele salir mucho más barato al trabajador que ir a unas oficinas cada día. Y cuando se trata de un autónomo, tener el despacho en casa implica ahorrarse el alquiler de un local. Claro que también gastas un poco más de luz y agua en casa, pero normalmente el incremento es irrelevante comparado con los ahorros citados antes, en especial los de comida y transporte.
Se come mejor en casa
Eso es relativo. Depende de como cocinas. Pero, por lo general, la comida casera es más sana que ir a restaurantes. Muchos trabajadores comen de menú, o en cafeterías, sino todos los días, al menos algún día a la semana. Y, normalmente la comida no es tan sana como la que se prepara en casa, en un entorno controlado.
Hay menos líos relacionales
El teletrabajo complica mucho algunas de las situaciones menos agradables relacionadas con las dinámicas de grupos, como los cotilleos, los juegos de poder, los celos entre compañeros, etc. La distancia física frena muchas de esas tendencias, y hace que la gente se centre más en el trabajo que en temas accesorios.
Se puede conciliar mejor con la vida familiar
El confinamiento demostró que no es fácil trabajar desde casa cuando hay que ocuparse de niños muy pequeños. Sin embargo, en la mayoría de los casos, trabajar a distancia permite conciliar mucho mejor familia y trabajo. Aunque solo sea por el ahorro de tiempo en el transporte, que permite estar más horas en casa. Pero, por supuesto, va mucho más allá. Si los niños necesitan algo urgente, tienen alguien para atenderles. Y algunas tareas cotidianas se pueden hacer en paralelo con el trabajo.
Pros y contras del teletrabajo: ventajas para las empresas
Infraestructuras más flexibles y baratas
Si se organiza de forma inteligente, el teletrabajo puede ayudar a tener una organización más flexible y más barata. Como no se necesita tener a todos los empleados en un mismo lugar al mismo tiempo, se pueden usar infraestructuras más pequeñas y más económicas. Incluso, en el caso de un formato híbrido, se puede recurrir a alquilar espacios de coworking ocasionalmente, en lugar de contar con oficinas propias. Y eso sin contar el ahorro de energía, de telecomunicaciones, y otros gastos similares.
Empleados más contentos
A la inmensa mayoría de los trabajadores les encanta la idea de poder trabajar desde casa algunos días al mes. Por lo tanto, el teletrabajo es una de las muchas herramientas que tiene a su disposición la empresa para fomentar la motivación y tener contentos a sus trabajadores. Se puede percibir como una ventaja no retributiva, como lo es disponer de un seguro médico privado, por ejemplo.
Menos ausentismo y más productividad
Un informe de Adecco publicado en el 2019 mostraba que los empleados en teletrabajo tienen hasta un 31% menos ausentismo laboral que los que van a la oficina. Varios factores pueden explicar esa diferencia. La mayor motivación que comentaba antes es una de ella. La posibilidad de quedarse en casa y trabajar en caso de una enfermedad leve, también lo explica. O, simplemente, la posibilidad de poder cuidar a un hijo enfermo.
El menor ausentismo ya es un factor de mayor productividad. Pero, unido a la motivación de los trabajadores, su autonomía para organizarse, y la ausencia de elementos de distracción, la mejora en el rendimiento puede ser muy significativa.
Hay menos riesgo de accidentes del trabajo
Por lo general, los accidentes entre el domicilio y el lugar de trabajo se consideran accidentes de trabajo. En consecuencia, como el teletrabajo limita mucho los desplazamientos, dentro de los pros y contras de trabajar a distancia hay que citar la ventaja de reducir mucho la siniestralidad laboral.
Pros y contras del teletrabajo: inconvenientes para trabajadores y autónomos
Falta de relaciones sociales
Si trabajar ocasionalmente un día desde casa puede resultar agradable a una mayoría de personas, hacerlo todos los días tiene como principal inconveniente el no tener interacciones sociales. Y eso, a la larga, puede pesar mucho. Yo, personalmente, lo he resuelto multiplicando las quedadas después del trabajo y los fines de semana.
Sedentarismo
Otro riesgo de quedarse en casa es caer en actitudes de sedentarismo. Ya no hace falta desplazarse hasta la oficina, ni entre despachos y plantas. Y la cocina está a dos pasos, con lo que hay un riesgo de alimentarse demasiado. Es un problema serio, especialmente para las personas que no practican una actividad física regular. Por supuesto tiene un fácil remedio, pero hay que ser consciente del riesgo.
Mezcla de las esferas personales y de trabajo
¿Dónde acaba el trabajo y donde empieza lo personal cuando trabajas desde casa? Es muy fácil mezclarlo todo. Psicológicamente, es mejor separar claramente esas dos partes de nuestras vidas. Y se puede hacer dedicando un espacio concreto y separado al trabajo.
Horarios descontrolados
Si la libertad y la autonomía es uno de los grandes pros del teletrabajo, una de las grandes contras sin duda es el riesgo que conlleva esa libertad: el descontrol de horarios. Es tentador trabajar mucho menos de lo que se debería, por pereza, o, al contrario, no saber parar. Incluso, es bastante frecuente pasar de un exceso al otro, intentando compensar. Para evitarlo, es recomendable planificar bien el trabajo y ponerse objetivos realistas para la semana y para el día.
Muchas tentaciones
Estar en casa implica tener muchas tentaciones. Abrir las redes sociales o Youtube solo por un momento y luego perderse durante largos ratos. Lo mismo con la televisión o una conversación con los hijos o la familia. Sin contar las tareas del hogar o todas las alternativas de ocio, o incluso la tentación de tirarse un rato en el sofá o en la cama para una siesta.
Pros y contras del teletrabajo: inconvenientes para las empresas
Falta de control directo sobre los empleados
El principal temor de las empresas es que el trabajo a distancia les haga perder el control directo sobre los empleados. Pero, en realidad, no es un tema preocupante. Primero porque lo más importante es que cada empleado cumpla con su trabajo, es decir que tenga los resultados que se le piden, no estar vigilado en todo momento. Y segundo porque hay muchas herramientas que permiten mantener cierto control, desde sobre el horario real que un empleado dedica al trabajo hasta softwares de organización y seguimiento de proyectos.
Cultura de empresa
Otro problema, asociado a la falta de relaciones sociales, es que es más difícil establecer una cultura de empresa. Si la gente no trabaja codo con codo, si no se ven a diario, es más difícil que tengan un sentimiento de pertenencia al grupo. Y, sin ese sentimiento, es más fácil que el talento se vaya a otra parte cuando encuentre una mejor oportunidad.
Reconocimiento
Otro problema relacionado con la falta de vínculos sociales es que se hace más difícil conocer mejor a los empleados, y, por lo tanto, tener una estrategia de recursos humanos coherente, y un reconocimiento de la labor de cada uno.
Costes
Hace unos meses, el Gobierno anunció que las empresas tendrían que hacerse cargo de algunos gastos asociados con el teletrabajo. En caso de tener oficina y de permitir a los empleados trabajar desde casa algunos días, existe una duplicación de ciertos costes, por ejemplo, en temas de equipos informáticos o gastos de energía.
¿El futuro son formatos mixtos o híbridos?
Antes de terminar este artículo sobre los pros y contras del teletrabajo, me parecía interesante intentar imaginar como sería el formato del futuro. ¿Seguirá dominando lo de ir a la oficina? ¿Trabajaremos todos desde nuestros domicilios? ¿O triunfarán los formatos híbridos?
Personalmente, creo que un formato mixto tiene muchas ventajas. Tienes mucha libertad porque la mayoría del tiempo trabajas desde casa, pero al mismo tiempo, te reúnes regularmente con tus compañeros de trabajo. Se puede crear una cultura de empresa, se puede detectar mejor los empleados con potencial. Todo el mundo gana. Por eso creo que, a medio plazo, podría imponerse ese formato. Y quizás desaparezca el formato tradicional de sede social y oficinas, para generalizarse el uso de espacios comunes, tipo coworking o alquiler de oficinas por días.
¿Y tú? ¿Qué opinas? ¿Crees que el teletrabajo se convertirá en una parte esencial de las relaciones laborales? ¿O lo que ocurrió en los meses pasados solo fue excepcional por culpa de la pandemia? No dudes en compartir tu opinión.