Muchos de los emprendedores que inician un negocio tienen la ambición de crecer hasta tener una empresa grande y rentable. Inevitablemente, para llevar a cabo el crecimiento de la forma más efectiva, necesitarás tomar decisiones informadas y contar con asesoramiento jurídico. Hoy voy a tratar algunos de los aspectos legales más importantes cuando quieres expandir tu empresa.
Elección de la estructura jurídica
Lo habitual en España es iniciar un proyecto empresarial con la forma jurídica de autónomo. Es un formato flexible y relativamente económico, que permite arrancar rápidamente y no tiene muchas exigencias administrativas. Sin embargo, en cuanto quieras hacer crecer tu negocio, o si desde el principio tu proyecto tiene un tamaño significativo, vas a necesitar asesoramiento legal y fiscal para elegir la forma jurídica más adecuada para tu situación. No solo existe la sociedad limitada, hay muchas variaciones. Cada una con sus requisitos y ventajas fiscales.
Aspectos legales para expandir tu empresa al nivel internacional
Muchos de los proyectos emprendedores, especialmente online, tienen vocación a la expansión internacional. Eso supone inmediatamente unos retos legales. Vas a tener que determinar como te interesa trabajar. A menudo, será interesante abrir una antena de tu negocio en otro país. Necesitarás abogados en Andorra, Francia, México o el país que te interese, para poder determinar qué estructura jurídica necesitas. Hay muchas opciones, desde la apertura de una sucursal hasta la creación de una filial, pasando por centralizar todo desde tu sede social, entre otras.
Cada posibilidad tiene unos requisitos legales y unas implicaciones fiscales. Deberás encontrar la que funciona mejor al nivel práctico, minimiza los riesgos legales y optimiza el pago de impuestos.
La expansión de los startups
Las empresas emergentes tienen necesidades específicas. Por lo general, estamos hablando de negocios que necesitan una aportación de capital importante para crecer, y que se materializa por un sistema de rondas de financiación. Uno de los elementos legales más importantes en esos procesos es el pacto de socios, un acuerdo privado que firman los accionistas de la empresa, para establecer las políticas del negocio y las relaciones entre los socios y la compañía. Pero hay muchos más aspectos jurídicos para tomar en cuenta en el mundo de los startups, y es importante tener un asesoramiento especializado.
Expandir la empresa mediante fusiones
No todos los negocios tienen un crecimiento orgánico. A veces, para acelerar el proceso, una buena opción es comprar un competidor. Así, no solo aumentas el tamaño de la empresa, sino que también reduces la competencia. Como puedes imaginar, hay muchas formas de integrar otro negocio dentro del tuyo. Puedes comprar la totalidad de la empresa, solo su fondo de comercio, solo algunos activos, y otras posibilidades. Cada opción tiene sus implicaciones legales y fiscales. Y hay bufetes especializados en M&A (Merger and Adquisition).
Protección de la propiedad intelectual
A medida que tu empresa va creciendo, se hace más conocida y puede atraer el interés de sus competidores. Si te va bien, es que haces las cosas bien, y lo normal es que otros se planteen copiar algunas cosas. Para ponérselo un poco más difícil, es importante que protejas los activos de propiedad intelectual de la empresa, como patentes, marcas comerciales y derechos de autor.
Protección de datos personales
Aunque todas las empresas, grandes y pequeñas, tienen la obligación de cumplir con las normativas sobre privacidad, lo cierto es que una compañía de mayor tamaño tiene más riesgo de recibir denuncias al respecto. Por eso, es importante asegurarte de que la empresa cumple con las normativas de protección de datos personales, especialmente con el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) de la Unión Europea.
Redacción de contratos
Un autónomo o una empresa pequeña no suelen tener que gestionar muchos contratos. Pero, cuando te planteas expandir tu empresa, está claro que este tipo de documentos se multiplica. Ten en cuenta que se redactan y firman contratos con empleados, proveedores, clientes, socios y hasta con terceros. Es fundamental tener muy bien estudiados y revisados esos contratos, porque un error en una cláusula podría suponer un perjuicio significativo para la empresa.
Gestión de impuestos y fiscalidad
Todas las empresas tienen que pagar unos impuestos. Pero, cuando crece tu negocio, coinciden dos cosas. Por un lado, tu actividad se hace más compleja, con múltiples casos particulares en materia fiscal. Por el otro, al pagar cada vez más impuestos, te empieza a interesar invertir en consultoría fiscal para comprobar que no existe ningún riesgo con tus impuestos, y para procurar optimizar el desembolso fiscal dentro de las posibilidades que permite la ley. Eso hace recomendable la contratación de abogados fiscalistas.
Conflictos y litigios
El crecimiento implica una multiplicación de las interacciones con terceros, sean empleados, clientes o proveedores. El incremento de las interacciones casi siempre acarrea un aumento de los posibles conflictos legales. Sea por un despido, por el impago de un cliente, o por un litigio con un proveedor, tienes que tomar en cuenta los eventuales conflictos legales que puedan surgir y cómo evitarlos o resolverlos. Por supuesto significará tomar medidas al nivel de control interno y organizativo, pero también será importante contar con asesoramiento específico.
¿Talento jurídico interno o externo?
Dentro del ciclo de vida de una empresa, el proceso de expansión del negocio suele venir acompañado del crecimiento de su estructura de personal. Llegado a cierto punto, tendrás que preguntarte si te interesa tener en plantilla un equipo de abogados o si será mejor contar con asesoramiento externo. Creo que la respuesta será: “un poco de ambas cosas”. En concreto, para los muchos aspectos jurídicos del día a día, como revisar algunos contratos o gestionar asuntos de personal, te vendrá bien tener a un profesional dentro de tu plantilla. Pero no puedes pretender que tu abogado sea experto en todo. Y por eso, siempre será interesante contar con los servicios de un bufete especializado cada vez que los requieras.