Hace unos meses, entrevistamos en el blog a un autor autopublicado, que nos contaba su experiencia personal en el mercado de la edición, los motivos que le habían llevado a publicar su obra por su cuenta. Hoy vamos a detallar una idea de negocio relacionada con este concepto, y no es una plataforma de edición online al estilo de Bubok, sino más bien una editora virtual para ayudar a los autores independientes.
La idea
Cuando escribes un libro por tu cuenta, te enfrentas a varias tareas importantes, entre las cuales destacan:
- La corrección del libro (tanto al nivel de estilo como de errores gramaticales o simples despistes).
- La maquetación del libro, especialmente cuando tiene imágenes.
- El diseño de la portada.
- La elección de una imprenta
- La comercialización (online y física).
La mayor parte de los autores independientes se centran principalmente en la última, que es cierto que es muy complicada, pero no por eso las otras tareas dejan de ser importantes. No olvides que los libros funcionan mucho por recomendación, y por lo tanto la
obra tiene que tener un mínimo de errores, así como una maquetación y una portada a la altura de sus pretensiones comerciales.
Por esos motivos, me parece interesante la idea de una editora virtual, con servicios de asesoramiento para autores que incluirían la corrección de estilo, la corrección de errores, la maquetación, el diseño, la impresión y consejos sobre la comercialización.
Ventajas para el autor
- Muchos de los autores autopublicados son principiantes, por lo que el asesoramiento de una editorial profesional les puede ser muy útil.
- No tienen por qué pasar un duro proceso de selección. La editora no publica el libro por su cuenta, solo asesora los autores.
- Pueden obtener mejores precios. La editora virtual puede negociar tarifas con profesionales del sector, para que se beneficien los autores.
- Una visión externa. Cuando una persona crea su propia obra, es difícil mantener la objetividad. La editora puede aportar una visión imparcial y profesional sobre el libro, tanto en el fondo como en la forma.
Monetización
Los servicios se pueden cobrar de distintas maneras. Si los correctores y encargados de maquetación están en plantilla de la editora, entonces se cobra por palabra y por página. Sino, se puede imaginar un sistema de comisión. Además, para servicios de asesoramiento, lo lógico sería plantear un sistema de packs de servicios, con distintos grados de asesoramiento en función de las necesidades del autor y del presupuesto que se quiera gastar.
Clientes
Los autores autopublicados son muy diversos. Van desde las personas que intentan hacerse un hueco en mundo de la literatura hasta aficionados que simplemente quieren publicar su obra, más como un hobby que con deseos reales de conseguir grandes ventas. Y las temáticas también pueden ser muy variables, con libros para niños (con muchas ilustraciones y mucha maquetación), novelas, diccionarios y guías de todo tipo.
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