Emprender no significa necesariamente crear una empresa. Enriquecerse no implica obligatoriamente aumentar el numéro de ceros en la cuenta bancaria. A la hora de lanzar un proyecto, son muchos los que se preguntan si crear una empresa o una ONG. Responden a objetivos distintos, pero la satisfacción personal puede ser tan importante en ambos casos.
Al principio, yo también dude entre estas dos opciones. Quería hacer algo que permita mejorar la situación de otras personas a la vez que me proporcionará una forma de vivir comodamente. Es precisamente esta necesidad de una estabilidad económica la que me hizo optar por una empresa. Pensé que si crease una ONG, dándome un sueldo suficiente para mis aspiraciones, sería poco ético porque el propósito de la ONG es que la gran mayoría de los fondos vayan para la causa, no para el funcionamiento.
Por otro lado, me parecía más fácil crear riqueza creando una empresa, y esta riqueza se reparte. Primero con los empleados que ójala pueda contratar después de algunos meses. Y sobre todo, he decidido que un % de la cifra de ventas la dedicaré a proyectos humanitarios. Posiblemente a través de donativos a ONG reconocidas al principio, y si las cosas se dan bien, creando una fundación que gestionaría yo.
De todos modos, quiero recordar a las personas que se sientan atraidas por las ONG por su aspecto fiscal más interesante que tengan cuidado, ya que el patrimonio de una ONG sólo se puede transmitir a otra ONG del mismo tipo, lo cual es totalmente razonable ya que no se trata de enriquecerse económicamente pero más bien por la experiencia.
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Tags: empresa u ONG, elegir, ventajas, inconvenientes, crear empresa, emprender
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