Los principales errores que cometen los emprendedores

principales errores que cometen los emprendedores

Si estás pensando en montar un negocio, puede que te sea útil reflexionar un momento sobre los principales errores que cometen los emprendedores. En muchos casos se convierten en motivos de fracaso. Te propongo repasar los más habituales. No te preocupes, voy a procurar darte algunas indicaciones para que les puedas evitar. Casi todo tiene solución, siempre que estés dispuesto a replantearte las cosas.

1º- Lanzarse en un sector sin tener experiencia 

Uno de los errores comunes del emprendedor es la inexperiencia. Está muy bien que te llame la atención montar tu propia tienda online o abrir un restaurante. Es genial que decidas irte de la ciudad para adaptar una casona para el turismo rural. Sin embargo, si nunca has tenido experiencia profesional en la actividad que quieres desarrollar, estás subestimando las problemáticas internas de cada negocio.

Hay una gran diferencia entre la visión romántica que puedas tener de la empresa que quieres crear y la realidad del sector. Si no tienes experiencia previa, tendrás que aprender. El problema es que si este aprendizaje ocurre después de abrir el negocio, te puede llevar a cometer demasiados errores para tener posibilidades de éxito.

Tienes formas de compensar la falta de experiencia. Quizás la más recomendable sea aplazar tu proyecto y buscar un trabajo en esta actividad. Por ejemplo, si quieres montar un restaurante con cero experiencia en hostelería, trabajar de camarero en un negocio que funciona bien te puede enseñar mucho. Otra opción es que te asocies con una persona con experiencia, y que te pueda asesorar durante el proceso. También es una posibilidad que optes por contactar con una franquicia, ya que suelen proporcionar procedimientos, formación y asesoramiento.

2º- Enamorarse de la idea 

Cuando montar un negocio, tienes que creer en tu idea. Esa confianza en tu proyecto es importante, porque te permitirá superar muchos obstáculos y corregir tu planteamiento, en lugar de desanimarte al primer evento negativo que te encuentres. Pero hay una gran diferencia entre estar confiado y estar cegado por haberse enamorado de tu idea. Tu idea no es nada sin la ejecución. No es nada sin un equipo que sepa salvar los obstáculos. No te enamores de la idea porque podrías convertir en testarudez lo que creerías ser perseverancia, y esto te llevaría a cometer muchos errores.

3º- No trabajar la propuesta de valor 

Lo acabo de decir: la idea de negocio no es nada sin su ejecución. El primer paso hacia una ejecución exitosa es que definas tu modelo de negocio y tu propuesta de valor. Me refiero a este factor diferencial que hará que el cliente te compre a ti antes que a la competencia. Es decir: no te puedes limitar a decidir abrir una pizzería. Tienes que crear una propuesta de valor mejor que los otros negocios similares en tu área. Si primero abres la pizzería y luego vas buscando como diferenciarte en función de cómo te vaya, tienes muchas papeletas para fracasar.

Recuerda: diferénciate. Si no los haces, estarás haciendo uno de los principales errores que cometen los emprendedores.

4º- Empezar a lo grande 

Muchos negocios se pueden iniciar con poca inversión. Otros muchos requieren bastante dinero. Pero en todos los planteamientos tienes la posibilidad de empezar a lo grande o de probar tu idea. Muchos emprendedores no se plantean alternativas y empiezan a lo grande, alquilando y reformando un local, invirtiendo en maquinaría nueva, contratando personal, etc.

No me malinterpretes. No estoy diciendo que no te arriesgues. Emprender es arriesgar. Pero no tienes porque jugártelo todo a una carta. Si te das el tiempo de la reflexión, puedes llegar a tener un proyecto mucho más barato que lo que pensabas inicialmente. Esto te dará más tiempo para que funcione (el dinero se acaba rápido). Si empiezas a lo grande, es más factible que fracases a lo grande.

Busca alternativas. Puedes encontrar maquinaria de segunda mano, puedes firmar contratos de alquiler en lugar de comprar, puedes condicionar la contratación de personal a un nivel mínimo de actividad, etc. En definitiva, busca flexibilidad. Y luego vas aprendiendo con un poco de ensayo y error.

5º- Empezar sin el capital suficiente 

Muchos proyectos viables fracasan simplemente porque no se empezó con el capital suficiente. Esto puede tener dos orígenes: la primera es haber optado por ir a lo grande cuando existían alternativas (justo el punto que comentaba antes), y la segunda es simplemente haber pecado de optimismo en las previsiones.

Mi consejo es que los proyectos empresariales suelen costar más de lo que inicialmente creías y generar ingresos más lento que lo que podías imaginar. Si no quieres que un buen proyecto se acabe antes de tiempo por falta de dinero, procura o plantear algo más barato, o empezar con un colchón de dinero más amplio. No olvides repasar tus opciones de financiación antes de lanzarte.

6º- Falta de foco 

El foco es un aspecto fundamental en un negocio. Es difícil a veces encontrar en que tema te tienes que centrar para no dispersar tus fuerzas, pero para conseguir tus objetivos no tienes más remedio que tener foco. Hay dos aspectos para los cuales es especialmente importante.

  • El cliente es lo primero. Aunque sepas que todos tus esfuerzos tienen que ir hacia ofrecer una experiencia magnífica a tus clientes, cuando inicies el negocio te darás cuenta que muchos temas importantes o accesorios requieren tu atención. Es imposible que solamente te dediques a tus clientes, pero es importante que te preguntes muchas veces a lo largo del día si lo que estás haciendo aportará valor a tu cliente o si estás perdiendo el tiempo en temas anexos.
  • Una sola propuesta de valor. En casi todos los negocios tendrás la tentación de añadir productos u servicios a tu planteamiento inicial. Esto responde a dos objetivos. Por un lado piensas que si ofreces más servicios el cliente tendrá una atención más completa, y por el otro, se suele pensar que si no se vende por un lado, siempre habrá la opción de vender por el otro. Pero en realidad, ocurre todo lo contrario. Si ofreces más de una propuesta de valor mandas una señal equivocada al cliente (ya sabes, aquello de quien mucho abarca poco aprieta). Al mismo tiempo, si tienes más productos dedicas menos tiempo en cada uno de ellos, por lo que se te hace cada vez más complicado mejorar y ofrecer una experiencia magnífica a tus clientes.

Emprender implica muchas solicitudes, y mantener el foco es difícil. Pero es fundamental, si quieres evitar uno de los errores más comunes de los emprendedores.

7º- Falta de planificación 

Aunque la realidad del mercado siempre vaya a ser diferente de lo que imaginabas y te tendrás que adaptar, necesitas un poco de planificación antes de montar tu negocio. Uno de los principales errores que cometen los emprendedores es lanzarse sin siquiera un mínimo estudio previo.

  • Plan de negocio. Una herramienta muy útil si la usas de forma apropiada. Te permite reflexionar sobre muchos aspectos de tu proyecto, anticipar y corregir tu planteamiento antes de empezar. También te sirve de apoyo para conseguir financiación o inversores.
  • Diseño y seguimiento de objetivos. Si quieres tener éxito, lo primero que tendrás que hacer es definir lo que es el éxito para ti, y eso pasar por la elaboración de unos objetivos estratégicos, que te llevarán a definir el planteamiento para alcanzarlo (tu estrategia). Y para saber como vas y poder corregir u adaptar tu estrategia, necesitarás medir tus resultados respecto a esos objetivos.

Sin planificación eres como un barco sin rumbo. Puede que tengas éxito pero dejas de lado muchas herramientas que aumentarían tus posibilidades.

8º- Equivocarse al elegir el equipo 

Una empresa se define primero por las personas: los promotores del negocio y los empleados. Si te equivocas a la hora de elegir a los socios o de contratar a los empleados, te va a costar mucho llevar a cabo tu proyecto. Los malos castings son errores comunes del emprendedor.

Busca personas con potencial. No tengas miedo a tener gente mejor que tú, al contrario. Comprueba que comparten tu sistema de valores, y selecciónalas por sus méritos. También tienes que saber que trabajar con amigos o familiares suele tener más complicaciones que beneficios, pero eso ya depende mucho de cada caso.

9º- Falta de decisiones 

Emprender no es fácil. Tienes que tomar decisiones grandes o pequeñas a diario, y muchas veces no tienes ni idea de cual es la mejor opción. La buena noticia es que no tienes porque tener miedo a equivocarte. Al contrario, tu peor enemigo es la indecisión. Si tomas una decisión y no resulta ser la adecuada, siempre que actúes rápido puedes corregir con otra decisión. Pero si te quedas valorando las opciones y dudando, quizás evites el error pero también perderás las oportunidades, y sin aprovechar oportunidades tu negocio está destinado al fracaso.

Procura decidir rápido. Tomate el tiempo justo para decidir. No se trata de ser impulsivo. Pero no lo demores más de lo necesario. No te busques excusas. Actúa y estate pendiente de las consecuencias para saber lo antes posible si acertaste o no y si tienes que corregir.

10º- Falta de adaptación 

Como te comentaba antes, el mercado nunca va a ser como pensabas que iba a ser, por mucho que lo hayas estudiado antes, hayas hablado con clientes, hecho encuestas, etc. Creo haber dejado claro que es fundamental que pese a ello dediques un tiempo a planificar, pero también quiero que estés consciente de que necesitarás adaptarte. Y no solamente cuando tu propuesta de valor se encuentre por primera vez con el veredicto del mercado, sino permanentemente.

El mundo cambia, las costumbres cambian, y esos cambios se están acelerando cada vez más. Un planteamiento que funciona hoy puede necesitar un cambio importante para seguir funcionando dentro de un año. Si enfocas tu proyecto en un sector tecnológico, ni te cuento, pero no es solo cierto para la tecnología. Todas las actividades cambian, y cada vez a mayor velocidad.

Por eso tienes que estar preparado para adaptarte. Muchas empresas exitosas han caído víctimas de la falta de adaptación, uno de los principales errores que cometen los emprendedores. Recuerda la historia de las locomotoras Baldwin, líderes en su tiempo, pero incapaces de entender el cambio.

11º- Falta de perseverancia 

Te advertí antes del riesgo de enamorarte de tu idea y volverte testarudo. Otra causa de fracaso muy habitual es lo contrario: abandonar antes de tiempo. Muchas de las otras recomendaciones que te hice anteriormente, como no empezar a lo grande, o ser flexible cobran más sentido cuando entiendes que la perseverancia es la herramienta que te llevará al éxito. Si insistes, te adaptas, aprendes, mejoras y no te has atado con una inversión demasiado grande, seguramente conocerás pequeños fracasos en tu camino pero a la larga lo tienes que conseguir porque habrás aprendido mucho de tus errores.

12º- No tener mercado 

Seguramente se podría incluir esta causa de fracaso dentro de la ausencia de planificación, pero es lo suficiente relevante para que le dedique un apartado. Por desgracia muchos proyectos están destinados a fracasar desde el inicio porque no hay mercado. Ocurre especialmente en proyectos muy innovadores. Y aquí lanzo una advertencia a muchos candidatos a emprender que están buscando la idea perfecta para hacer algo que nadie ha hecho antes.

Por supuesto es admirable que haya personas innovadoras que quieran romper las reglas y descubrir nuevos océanos azules. Pero si quieres hacer algo muy innovador, que nadie haya hecho aun, significa que el mercado aun no existe. Y en la gran mayoría de los casos, el mercado no existirá. Al menos es lo que demuestran las altas tasas de fracasos de proyectos innovadores.

Lo diré de otra forma. El mercado de los restaurantes llegó a perder un 30 o 40% de sus ventas durante la pasada crisis. Pero seguía habiendo un mercado enorme, y algunas marcas aprovecharon para crecer, especialmente cadenas low cost. No era buena idea montar un restaurante de barrio igual que los otros restaurantes de barrio si todos estaban medio vacíos. Pero había cosas por hacer en el sector de la restauración. No creas que porque un sector este decaído, o con mucha competencia es malo para ti. Si hay competencia, hay mercado. Y si tienes la suerte de crear una propuesta muy innovadora y descubrir un nuevo mercado, tu competencia llegará rápidamente.

13º- Ubicación 

No voy a explayarme demasiado en el asunto ya que en el artículo Ubicación, ubicación, ubicación ya te expliqué lo fundamental que es este elemento para muchos negocios, especialmente en los comercios, tanto en la economía tradicional como online.

No quisiera que te confundieras con lo que dije antes sobre el riesgo de empezar a lo grande. Si montas una tienda en una calle poco transitada para pagar un alquiler más barato, posiblemente estés cometiendo un grave error. Algunas inversiones son imprescindibles.

14º- Falta de interés por la actividad 

Sé que es difícil cumplir el primer punto (experiencia) y al mismo tiempo tener mucho interés (incluso pasión) para lo que te vas a dedicar. Pero cuando inicias un negocio, durante muchos meses, incluso años, la cantidad de trabajo es muy elevada. Si quieres tener la oportunidad de perseverar y superar todas las crisis que te vas a encontrar, es un gran punto a favor sentir pasión por lo que estás haciendo. Si no tienes este interés muy rápidamente podrías odiar lo que haces y abandonar.

15º- Esperarse a tener un producto perfecto 

Fracasar también es no lanzarse cuando uno tiene la oportunidad. Muchos candidatos a emprender se lo piensan demasiado. Quieren tener la idea perfecta, o desarrollar la propuesta de valor perfecta, pero esto no existe. Si te esperas a tener un producto perfecto no nunca te lanzarás (cosa que se puede considerar un fracaso por omisión) o si lo haces será muy tarde y los competidores ya habrán aprendido del mercado mientras tu estabas jugando con hipótesis.

16º- Minimizar el esfuerzo comercial 

Por muy bueno que sea tu producto, vas a tener que aprender a vender. Y no solo me refiero a pagar publicidad, sino también a hacer labores de comercial. Si no te gusta o tendrás que aprender, o asociarte con alguien que lo puedas hacer. Ningún producto se vende solo, por muy bueno que sea.

Incluso si piensas en una actividad online, estarás pasado a lado de muchas oportunidades si no haces una labor comercial tradicional, y trabajas una red de contactos.

* *

Estoy seguro de que hay muchas más errores clásicos en los proyectos empresariales, pero esos me parecen los más comunes. Creo que si repasas cada una de ellos y los contrastas con tu situación personal te puede servir de ayuda.

Si piensas que debería incluir más errores habituales, no dudes en proponerlo en la sección de comentarios.En el próximo capítulo de esta guía para emprender hablaré de los motivos para montar un negocio.

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1 comentario en “Los principales errores que cometen los emprendedores”

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